El UFC, Rusia y el fantasma de Rocky
- Samuel Prieto Rodríguez
- 28 nov 2014
- 3 Min. de lectura
Samuel Prieto R.
El anuncio es impresionante por donde se le vea. El siguiente objetivo del Ultimate Fighting Championship es Rusia. El acuerdo está por de salir del horno, reveló el director de marca global, Garry Cook: "estamos a punto de anunciar un acuerdo de televisión en Rusia. 55 millones de hogares”.
Además de los muchos millones de personas que potencialmente pueden integrarse a las oleadas de aficionados al UFC, esta es una cuestión de signos y significados. La cortina de hierro cayó hace 25 años y las rivalidades entre las potencias del norte dejaron de ser lo que más pone al mundo en tensión, pero aun así continúan fijas en el ánimo mundial. La presencia del restaurante norteamericano de hamburguesas más típico a muy pocos metros de la Plaza Roja de Moscú aún es motivo de miles de discusiones. Enfrentar a deportistas estadounidenses y rusos continúa siendo la mecha que enciende muchas pasiones.
Para empezar, el UFC nunca ha realizado un evento en Rusia y necesariamente tendría que organizar uno de grandes dimensiones para su lanzamiento en esas tierras. Es el país del mejor peleador en la historia de las Artes Marciales Mixtas, Fedor Emelianenko, quien en contraposición nunca pisó un octágono, ya retirado, invicto durante una década y a quien sólo uno de docenas de pesos pesados estadounidenses pudo derrotar: Dan Henderson.
La liga rusa más importante de MMA es M1-Global, con mucha presencia en Asia y Europa del Este. Uno de sus propietarios es Fedor y su seguidor más destacado es el propio presidente Vladimir Putin, a quien se le ha visto muchas veces presenciando eventos desde el ring side y en fotografías con su campeón nacional.
Así que el Ultimate Fighting Championship no está planeando una aventura más. Va a conquistar territorio rival. La misión es titánica y Garry Cook lo sabe: “el contenido relevante para todos los otros mercados, la creación de más contenido, la creación de héroes locales, fama nacional. La historia es de dos personas en el combate. Va a haber un ganador, no va a ser un perdedor. No hay más drama que eso y vende donde quiera que estés en el mundo ".
¿Pero está listo el UFC para esa incursión? Seguramente, aunque el peligro es que termine viéndose tan artesanal como cuando en el cine ochentero Rocky Balboa fue a enfrentar a Iván Drago. Ganó pero con muchas desventajas y bastante más drama del necesario en términos de un choque de titanes.
El UFC está lesionado y no de manera superficial. En sus proyecciones de septiembre la calificadora financiera Standard & Poor´s había calculado que, a pesar del crecimiento, sus ganancias se derrumbarían 30% comparándolas con las del año pasado. Para el informe de octubre esa proyección subió hasta el 40% porque las cosas continuaron saliéndole no muy bien que digamos.
La razón principal es que la lesión de Caín Velásquez terminó desinflando las ventas de pay per view del UFC 180 en Estados Unidos y, por curioso que parezca aunque muy entendible en términos de la afición que es la que los mantiene con su dinero, también les pegó que aún no esté concretado el regreso al octágono del ex campeonísimo peso welter Georges St. Pierre que había creado tantas expectativas.
Otros factores en la reducción del dinero son las inversiones que ha hecho el Ultimate Fighting Championship para el largo plazo. Su canal de internet UFC Fight Pass aún requiere consolidarse antes de que comience a dejar ganancias y las altas exigencias de contenidos por sus contratos con la televisión les han obligado a organizar una gran cantidad de eventos muy caros y más aún cuando terminan cancelándose por las varias lesiones que han sufrido últimamente sus figuras.
El problema es que no le queda otra más que seguir con ese mismo ritmo porque a su contrato actual con la televisión estadounidense todavía le quedan 4 años de vigencia. Actualmente las MMA son el deporte de mayor crecimiento y el UFC su mayor exponente. Llega a casi mil millones de telehogares en el mundo en más de 145 países con 28 idiomas diferentes.
Sin embargo tiene una lesión severa en un órgano vital: sus finanzas. Con esa lesión, quién sabe cómo le irá entrando a Rusia que puede ser su gloria o su perdición... el fantasma de Rocky.
Artículos anteriores relacionados con este tema:
19.11.2014 La guerra de las MMA
17.11.2014 "Ahora es cuando", dice el UFC
07.11.2014 El UFC y la bola de cristal
Comentarios